Silithrim-i-Mirëtiri
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.

❃ Silëthrian Mîrmuil ❃

Ir abajo

❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ Empty ❃ Silëthrian Mîrmuil ❃

Mensaje  Silëthrian Dom Oct 20, 2019 8:59 pm

❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ Portad12

❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ Csp210 Nombre:
Silëthrian Mîrmuil, Lady of the Shattered Chain.
Significado: Reina de la Luz, Joya misteriosa. Dama de la Cadena Rota

Aparentemente se trata de un nombre en quenya pero la realidad es que su etimología se remonta al élfico primitivo. Estos conceptos perduraron casi intactos en noldorin, doriathrim y sindarin, de manera que podría leerse de la misma forma en todos ellos.

Silë: Resplandeciente. Luz de las estrellas.
th: Viene del adjetivo «tharan» que significa “enérgico”.
-rían: Reina. Deriva de  «rî» “corona” y «ann» “talento”.
Mîr: Joya.
-muil: Secreto, sombra o crepúsculo.


Sin embargo, en diferentes momentos de la historia y por la influencia cultural de otros pueblos también usó distintos nombres. En Eryn Galen la llamaron Nurmithiel (Dama de los secretos), mientras que los enanos de Moria la conocieron como Saelentari (Reina sabia). En fechas más recientes los hombres de Gondor la nombraron Cynreloth (Flor de runas).

❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ 114

❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ Csp110 Edad: La edad de Silëthrian es muy difícil de determinar. Quedan pocos seres que hayan sobrevivido desde sus días su juventud. No obstante, hay historias que registraron su andar sobre Arda desde las Edades de los Árboles, así que es fácil suponer que tiene más de 13,000 años.

❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ Csp210 Estatura: 1.77 m.

❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ Csp110 Raza: Élfica.

❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ Csp210 Lugar de origen: Algunos dicen que nació al oriente de la Tierra Media, en una zona que ahora es inaccesible por los cambios del mundo. Tal vez cerca de la bahía de Cuiviénen antes de la fundación de los grandes reinos. Aunque lo cierto es que nadie sabe cuándo, ni dónde o quienes fueron sus padres.
La primera ciudad que habitó fue Doriath.

❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ Csp110 Clase: Rune-keeper.
Líder de los Silithrim.
Hechicera y sanadora.

❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ Csp210 Habilidades:
Su habilidad principal es el dominio de las Ciencias Élficas. Estas artes, elevadas y extraordinarias, fueron desarrolladas en Valinor y resultan tan increíbles para los mortales que comúnmente lo llaman «magia».
El encantamiento más poderoso que conoce consiste en imbuir objetos con virtudes, normalmente piezas de joyería creada por ella misma. Si bien, hace mucho tiempo que no lo hace y prefiere que ese tipo de magia no sea utilizada.
Es una excelente sanadora, aunque no tan buena como lo era en antaño, antes de tener contacto con la muerte.
También es una cocinera extraordinaria. Esto es algo que solo saben sus seres amados. Se dice que a veces imbuye propiedades mágicas en algunos de sus preparados, aunque ella jamás habla al respecto.
Domina la escritura en sarati creada por Rúmil de Tirion en Valinor, aunque ahora está completamente en desuso. De la misma forma recuerda el doriathrim, quenya, noldorin y algunos otros dialectos que ha aprendido en su paso por el mundo.
Es una de las pocas personas que aún recuerda los secretos para la creación del Ithildin.

❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ 611

Personalidad: Silëthrian es uno de los seres más antiguos de la Tierra Media y, como tal, posee una inusual aura de misterio. Muy pocos la han visto de cerca y aún menos han tenido oportunidad de mediar palabra con ella.

Su personalidad es encantadora de una forma poco común. Siempre habla muy bajo y con un tono casi malicioso, como si ronroneara divertida un plan extraño. Aunque al mismo tiempo emana serenidad y sabiduría que de manera natural demandan obediencia y humildad en su presencia.

Posee un rostro apacible y un brillo en la mirada que da la impresión de que piensa muchas más cosas de las que dirá. Sus modales son impecables y tiene una hermosa sonrisa. Su conversación es culta e ingeniosa.

Por otro lado, sus decisiones son prácticamente indestructibles, si bien, es partidaria de actuar con «la cabeza fría». Silëthrian es excelente para planear toda una serie de eventos que desemboquen en lo que ella desea, y en muchas ocasiones esto ha ayudado a resolver inconvenientes sin necesidad de violencia.

Todos sus movimientos son elegantes y pausados. Es un ser solitario por naturaleza, que pasa la mayor parte de los días en reclusión meditativa. Comúnmente se le puede encontrar contemplando el paisaje con absoluta serenidad, totalmente embebida en un libro o escribiendo alguna crónica del pasado. En esos momentos Silëthrian siempre luce un semblante nostálgico, triste y distante, que se disimula en cuanto alguien aparece a su alrededor.

También es una dama decidida y valiente. Noble, brillante y astuta hasta niveles francamente peligrosos, así que dependiendo del tipo de relación que se tenga con ella, eso puede ser una bendición o una maldición.

No es la clase de persona que se apega con facilidad, pero sí del tipo que brinda su apoyo a cualquiera; si esa persona lo necesita mucho y... en verdad no hay nadie más en el mundo a quien pueda recurrir con su asunto. Su confianza y aprecio reales son bastante difíciles de conseguir, aun cuando por ser amable con todos no lo pareciera. No obstante, cuando alguien se vuelve cercano es absolutamente incondicional, dulce y afectuosa.

Al hallarse en un ambiente de confianza suele usar sarcasmos e ironías manteniendo el semblante serio, ya que encuentra muy divertido causar confusión momentánea en su interlocutor.

❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ Csp110 Apariencia: Camina en el mundo como una mujer pálida, de largos cabellos cobrizos y profundos ojos grises, tan brillantes que el reflejo del bosque y el mar puede asomarse en ellos cuando el día está claro. Sus extraños iris muestran diminutos destellos danzantes, que se agitan ante sus emociones o decrecen por su apatía.

Su voz es similar al musical ronroneo del agua, y por alguna razón tiende a generar inquietud en algunos de sus interlocutores.

Algunos se sienten ansiosos en su presencia, pues su peculiar mirada parece traspasar el alma de las personas y se rumorea que ella puede ver los verdaderos sentimientos y las debilidades.

❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ 410


❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ Csp210 ▒♕ Su Historia ♕▒ ❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ Csp110

Todo lo que se sabe acerca de su pasado no es más que una leyenda.
Algunas historias hablan de viajeros que fueron salvados por su benévola intervención,
otras dicen que fue su misericordia lo que les brindó aquello que anhelaban.
También existen relatos acerca de que compartió pasos con Mithrandir.
Mientras que otros afirman que eso es imposible pues ella es malévola,
y han estado aterrados por su flamígera presencia.
Además, no son pocos los que dicen que su ayuda siempre tiene un precio
y que en ocasiones ha sido tan cruel como la pérdida de un sentido.
Dejando en duda a quienes narran que alguna vez aceptó cosas insignificantes
con suma humildad en retribución por grandes proezas.
Pero ¿qué será cierto en esos cuentos narrados por mortales?


El bosque, tan antiguo como las aguas del mar, se levanta impasible sobre las almas que se arriesgan a internarse en su corazón. Ahí es donde ella habitaba, cantando las mismas melodías que se entonaron en el inicio de todo. La juventud de Arda resplandecía en cada laguna y piedra, aunque los peligros de Melkor se cernían como una sombra constante. Entonces los Eldar comenzaron a hablar de partir hacia las resplandecientes tierras de los Valar y algunos emprendieron el viaje para acercarse a la costa. Fue ahí donde un pequeño grupo escuchó un susurro venido de las sombras. El tono melódico y tintineante les insinuó que se trataba de un ser benévolo; tal vez una de ellos. Desde ese entonces se cuenta que aquellos que han escuchado la voz de Silëthrian caen bajo el encanto de sus hipnotizantes murmullos, similares al agua que corre por los ríos y al sonido de las hojas mecidas por el viento.

Esa noche tras una larga jornada tres elfos se internaron en el bosque en búsqueda de la voz pero solo lograron ver una llama danzante a la distancia. Más tarde, cuando las estrellas ya estaban en su máximo esplendor la advirtieron por primera vez. Ellos pensaron que se trataba de uno de los espíritus del fuego del séquito de Vána, así que se refirieron a ella como Fëanári. Tras el encuentro en un claro de cipreses, ella habitó con el grupo y fue feliz por tener compañía. Sin embargo, Silëthrian presentía que pronto tendría que decir adiós.

Eventualmente su camino la llevó con los elfos Sindar, que en la incansable búsqueda de Elwë, su rey, habían quedado atrás en el éxodo a Valinor. Fue así que Doriath, el primer gran reino sobre la Tierra Media, se convirtió en su hogar durante las Edades de los Árboles y más allá. Muy pronto Silëthrian se halló inmersa en el ambiente de la corte y quedó fascinada por los conocimientos y la gracia de la reina Melian, de manera que buscó aprender de ella todo lo posible; serenidad, sabiduría y magia. Hasta el día de hoy ella la considera su maestra y guía cada vez que debe tomar una decisión.

❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ 710

El alma de Silëthrian siempre vibró en armonía con el fuego y muchos de sus hechizos se crearon imitando la apariencia hipnotizaste de ese elemento. Se dice que hace milenios, cuando realizaba estas artes, amaba utilizarlas para curar los males del cuerpo y el espíritu. Sus habilidades era famosas, incluso más allá del mar de Ekkaia. Sin embargo, el destino de Doriath marcaría para siempre el suyo.

La Segunda Matanza de Hermanos orquestada por los hijos de Fëanor en búsqueda del Silmaril es uno de los recuerdos más dolorosos que pesan en su corazón, pues en aquel momento su conocimiento, antes usado para el bien, debió ser enfocado a la destrucción de sus atacantes. Numerosos elfos cayeron bajo el fuego de sus hechizos y aunque a ella le gusta pensar que así salvó la vida de incontables ciudadanos inocentes, el dolor de matar a otros eldar jamás se alivió por completo. A partir de entonces su habilidad para curar quedó menguada.

Se sabe que Silëthrian participó en la Guerra de la Cólera en dónde Melkor fue vencido. Después volvió al lado de los sobrevivientes de Doriath y Gondolin para continuar juntos la búsqueda de un hogar. Para ese momento, su amistad con Arvalileth le había ayudado a reponerse un poco de las heridas del pasado.

Eregion fue fundada en el año 750 S.E. y para su fortuna se convirtió en el sitio perfecto para desarrollar las ciencias élficas. Ahora, gracias a sus aliados hombres y enanos, la fabricación de tesoros adquiría un nuevo sentido. Silëthrian pronto quedó envuelta en el círculo de señores de la ciudad y su interés se volcó en muchos saberes, tales como las runas y el hermoso arte de la creación del Ithildin; material desarrollado por Celebrimbor a partir de mithril refinado. Su uso más común fue el hacer puertas ocultas que solo se revelaran a la luz de la luna, y entonces requirieran de una contraseña hablada para abrirse.

Silëthrian abandonó la ciudad muchas veces para ver más del mundo y quedó maravillada por su belleza; incluso las austeras tierras del este alegraron su corazón. Pero siempre volvía a su hogar con gusto para escribir todo aquello que había aprendido. Ahí, esperaba en el salón junto al fuego a que las flores crecieran y las hojas cayeran. Aquella paz no podía durar para siempre.

Annatar, el Señor de los Dones, llegó a Ost-in-Edhil ofreciendo grandes conocimientos a todos aquellos que estuvieran dispuestos a escuchar. La tentación de obtener ese conocimiento la llevó a mostrarse públicamente como una de sus partidarias; habló siempre a su favor cuando muchos aún dudaban y puso gran atención a sus discursos cuando él buscaba instruirlos. Durante cuatrocientos años Annatar compartió su conocimiento y la creación de los anillos de poder se puso en marcha, al tiempo que Silëthrian seguía fielmente las lecciones de su nuevo maestro; en él vio extraordinaria belleza y profunda sabiduría.

La castaña aprendió el arte de imbuir objetos con virtudes al lado de los Mírdain. Se forjaron cientos de anillos con atribuciones menores antes de conseguir prendas de gran poder. Silëthrian estudió el método por siglos, dedicando días y noches a la comprensión de los secretos y encantamientos. Ponía atención en los errores, tanto ajenos como propios, a la vez que tomaba notas acerca de cada progreso y virtud conseguida con éxito.

Las crónicas cuentan que la hechicera participó en la creación de muchos anillos, pero hubo seis que forjó ella misma. Cinco quedarían bajo el cuidado de la orden de los Mírdain mientras que el sexto, el último en ser creado, tendría una historia diferente.

Ocurrió durante una noche de diciembre. Silëthrian se dirigió en silencio a la imponente Tham Mírdain para realizar el hechizo que había diseñado especialmente para sí misma. Susurros y destellos de metal incandescente precedieron al nacimiento de la que sería su obra maestra y el orgullo de su vida: Faeloth, Flor del Espíritu Fuego. Aquella joya resplandeciente como la propia luz de sus ojos, poseía tres gemas carmesí formando una flor. Su extraordinario poder consistía en «alimentar el fuego», favoreciendo los deseos más profundos del portador y generando un vínculo con los elementos del mundo.

❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ 311

Silëthrian recuerda el preciso instante en que la verdadera identidad de Annatar quedó al descubierto. Aquel fue uno de los momentos más devastadores de toda su vida. No habló con nadie tras ese hecho pero tomó una decisión. La castaña escribió una nota destinada solo para los ojos de Celebrimbor y se marchó de la ciudad rumbo a Lothlórien.

~ ~ ~   ~ ~ ~   ~ ~ ~

Presta el oído a todos, y a pocos la voz.

Hay una falsa modestia que es vanidad, una falsa virtud que es hipocresía y una falsa sabiduría que es prudencia. Sin embargo, me he arrepentido de haber hablado y nunca de haber guardado silencio. Tristemente no es posible volver a los sitios de los que he partido, porque he cambiado. Intentaré que un destello de luz ilumine mi senda antes de aspirar al retorno, y que la gracia de ese fulgor nos asista en la oscuridad.

Delibera con cautela pero obra con decisión; cede con gracia y oponte con firmeza.


❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ Eslabo10

~ ~ ~   ~ ~ ~   ~ ~ ~

La misiva, cerrada sin el sello de su casa, estaba firmada con una sola letra deformada de manera intencional; una S simulando un eslabón roto. Aquella muestra de arrepentimiento tenía la sola intención de mostrar su pesar. Sin embargo, con el paso del tiempo, la historia de este hecho fue tomada como un gesto de nobleza y humildad dignos de reconocer en una dama de tal abolengo. El icono representaba la ruptura con el pasado, el quiebre de un momento decisivo y la determinación de seguir adelante. Fue así que el titulo de la Dama de la Cadena Rota se acuñó para ella desde los labios de grandes Señores de los Elfos.

Tras su llegada a Lórien y la apresurada petición de ayuda para su pueblo, Silëthrian también encontró consuelo en la inmensa sabiduría en Galadriel. Si bien, no había tiempo que perder y su primera intención fue regresar a Eregion para ayudar a sus seres queridos, pero la iniciativa de Celeborn acerca de enviar a un ejército que interceptara a los orcos se presentó como una oportunidad perfecta para volcar toda la ira que aún la invadía. Sin dudarlo se ofreció como voluntaria y marchó con los elfos silvanos que se encontraron con el enemigo; la batalla ocurriría en las tierras que en el futuro serían conocidas como el Abismo de Helm. La hechicera recuerda poco de aquella cruzada. Sus pensamientos estaban nublados y confusos, evocando todos los momentos en que ella había participado favoreciendo a Annatar. ¡Se sentía cómplice de las sombras! Su rabia interior había tomado el camino de la violencia. Decenas de orcos cayeron por su mano, aunque ella no podría enumerar los hechizos o técnicas usadas; mientras todo aquello sucedía su mente estaba en un sitio muy lejano y perturbador.

Las fuerzas élficas no eran suficientemente numerosas para hacer frente a Sauron y eventualmente fueron vencidas. Silëthrian fue tomada como prisionera y mantenida con vida solo porque uno de los capitanes orcos, informado de las ambiciones de su Señor, pensó que el extraño anillo que la castaña portaba podría estar relacionado con su búsqueda. De manera que ordenó llevarla con ellos para poder entregarla a Sauron en persona, esperando que eso le generara algún beneficio.

Ninguna historia narra los detalles de este episodio de su vida, pero se asume que en algún punto ella logró escapar y llegar a Eregion durante el ataque. Esa fue la primera vez que Silëthrian atribuiría a Narloth el poder para salvarla.

Las imágenes de muerte y destrucción eran terribles. Ella ayudó en todo lo que pudo. Combatió y dirigió ciudadanos para que pudieran huir, hasta el momento en que ya no logró ver a más elfos vivos a su alrededor. La vorágine de orcos en frenesí de batalla lo había invadido todo. Fue entonces, justo antes de abandonar la ciudad, que una corazonada la detuvo. Una de las casas al final de la calzada, ahora con la puerta rota y los árboles en llamas, pertenecía a una pareja de amigos suyos. La castaña entró sin saber realmente qué era lo que buscaba, pero ahí la estaba esperando. Debajo de la cama principal dos pequeños ojos azules temblaban aterrados, al tiempo que varios orcos saqueaban los tesoros familiares sin advertir la diminuta presencia. Con sus últimas fuerzas, Silëthrian acabó con las horrendas criaturas y tomó a la niña para abandonar la ciudad.

La castaña se dirigió al oeste esperando hallar a más refugiados en el bosque de acebos. Sabía bien que el paraje era enorme y las posibilidades eran pocas. Además se encontraba exhausta, herida, desmoralizada y con pocas ganas de seguir adelante, pero saber que la vida de esa pequeña estaba en sus manos la impulsó a continuar. A media noche por fin halló a un grupo de supervivientes que fueron guiados por Arvalileth hacia una cueva oculta.

Eventualmente este pequeño grupo se convertiría en su nueva familia. Viajaron juntos hacia Lothlórien y, por fortuna, recibieron el permiso para habitar ahí de forma permanente. No obstante, el corazón de Silëthrian aún se hallaba sumamente herido, su mirada vivaz no volvería a ser la misma en un largo tiempo. Solo la crianza de la pequeña Melfindeth daba luz a su espíritu.

En el año 2932 S.E Sil tomó una decisión. Hacía mucho tiempo que Mel era una adulta y su camino como una prometedora arquera estaba trazado. Por lo tanto, una nueva senda le aguardaba. Ya no tenía deseos de habitar en cortes o bellos palacios, ni de escuchar las viejas canciones o rodearse de la belleza de sus iguales.

Silëthrian abandonó Caras Galadhon sola, dejando una nota para Melfindeth. Ahí explicaba algunos de sus motivos, deseos e intenciones para el futuro, aclarándole que, sin lugar a dudas, su amor sería una eterna luz de esperanza para ella.

La hechicera desapareció de las miradas por los siglos restantes de la Segunda Edad del Sol. Muchos pensaron que había muerto. Algunos afirman que durante ese tiempo habitó en lo profundo de distintos bosques; Eryn Galen, Rhosgobel y Fangorn. Otros dicen que viajó por el mundo, envestida por trajes humildes que le permitieran pasar desapercibida. Sin embargo, no se sabe con certeza ni lo que hizo o a dónde fue en ese tiempo.

La llamada para unirse bajo el estandarte de Gil-Galad en el año 3430 S.E. con el fin de marchar en la Guerra de la Última Alianza, fue el momento ideal para su reaparición en las historias de los Eldar. Silëthrian combatió con las fuerzas lideradas por el rey Oropher y tras la victoria permaneció en Mordor por los siguientes siete años en el sitio de Barad-dûr, enfocada en repeler los sortilegios enviados por el enemigo.

El día que Sauron cayó ante Narsil un peso se liberó en su corazón. Por fin había hecho algo importante que combatiera su culpa; había contribuido a la caída del mal que ella misma había favorecido.

De regreso en Lothlórien, por primera vez en mucho tiempo, la luz en los ojos plateados de Sil se veía renovada y aguda. Pasó largo tiempo leyendo, escribiendo y meditando en el Talan Brethil, y fue ahí donde una noche de julio del año 326 T. E. fundó la orden de los Silithrim; Gente de la Luz de Luna. Su misión sería recobrar todos los anillos forjados por los Gwaith-i-Mírdain, y convertirse en los eternos custodios de tales reliquias.

A partir de entonces la labor por las joyas ha sido el motivo de su existencia. Silëthrian estableció su hogar en Dol Silithrim, la isla que el rey Anardil de Gondor les obsequiara. Si bien, no es extraño verla emprender un nuevo viaje a través de Arda, ya sea para rastrear un anillo de suma importancia, o para realizar alguna de sus misteriosas travesías; la Guerra del Anillo se erguía como la última barrera de la redención.

❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ 211

❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ Csp110 Datos extra:

El escudo de su casa está compuesto por tres hojas de roble rodeadas por un anillo, que a su vez está contenido por una flor de dieciséis pétalos.
❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ Sello_10

Comenzó a ser llamada Mîrmuil (Joya misteriosa) a partir de los hechos ocurridos en Eregion.

Su única familia conocida es Melfindeth aunque su lazo no es sanguíneo. La joven ha vivido como su hija desde que la hechicera le rescató de las ruinas de Eregion.

La castaña desarrolló el diseño de los anillos de la orden utilizando una pequeña cantidad de Ithildin. Pensó que aquel brillante arte del pasado reflejaría bien su labor. Aquel sería un distintivo oculto a los ojos ajenos, mientras que que de noche, cuando la luz de la luna ilumina a los viajeros, los mostraría como guardianes extraordinarios sin miedo a la oscuridad.

Silëthrian participó en la creación de numerosos anillos de poder con la orden de los Mírdain, pero solo forjó seis ella misma. Todos ellos fueron catalogados como objetos poderosos y recibieron nombres propios, aunque esa información se guarda en secreto. Los cinco primeros quedaron bajo en cuidado de los herreros y tras la caída de Eregion se desconoce cuál habrá sido su destino final. Silëthrian espera encontrarlos algún día.

El sexto anillo que Silëthrian forjó, Faeloth, continúa siendo de su propiedad. Lo creó especialmente para sí misma y su poder esencial es «alimentar el fuego» interior. Es decir, es capaz de favorecer los deseos más profundos del portador, al mismo tiempo que los hechizos, sobre todo los de fuego, se ven exponencialmente potenciados.
Como dato adicional, se puede agregar que con tiempo Silëthrian ha notado que la fuerza del anillo también influye sobre el fuego natural; por ejemplo, si hay una vela cerca ésta arderá con mayor intensidad.

Porta a Faeloth en el dedo cordial de la mano derecha. Mientras que el anillo de la orden descansa en el anular de la izquierda.

Su casa en Dol Silithrim cuenta con la asistencia de numerosos sirvientes que se encargan de las labores cotidianas. Entre ellos hay algunos que llevan muchos años bajo su servicio; los más apreciados por Silëthrian son Radella, el ama de llaves, Eldinar, el encargado del establo, y Tineriel, la guardiana.
(Argumentalmente la casa se encuentra dentro de la isla, pero se puede visitar en 1 Cypress Road de Gwaetham; es el mismo barrio de la casa de kinship)

Silëthrian usa dos monturas diferentes dependiendo de la labor que le ocupa. Para asuntos sociales se acompaña de Thaverel, un hermoso venado negro que antes habitaba en el bosque cercano a su hogar. Tras saber de su existencia la castaña acudió a verlo con frecuencia, pasó muchas tardes cantando al compás del viento y el río, pues sabía que aquello le agradaba. Eventualmente el noble animal le ofreció su amistad.
Por otro lado, para acudir a la batalla ella prefiere usar a un extraordinario corcel rohirrim llamado Morandir, que fue un regalo de Cynmirel.

Ella enaltece, por encima de todo, la lealtad, el valor y la nobleza. Mientras que siente un profundo desprecio por la descortesía, la inmadurez y la soberbia.

Silëthrian siente admiración por las diferencias de cada raza, y opina que cada una es maravillosa a su manera.

Suele firmar utilizando la abreviatura de su nombre, «Sil», en tengwar.
❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ Sil12

Por razones evidentes, Silëthrian conoce bien a todos los Silithrim. Ella se ha encargado de entrevistar a cada nuevo aspirante para decidir si es digno de pertenecer a la orden, y de tomar la gran responsabilidad de su labor.
Con algunos ha entablado una gran amistad sin importar su raza o edad, aunque es muy poco común verla en compañía de alguien si el deber no lo requiere.

❃ Silëthrian Mîrmuil ❃ 510
Silëthrian
Silëthrian
Amada Líder

Oro Oro : 176

Volver arriba Ir abajo

Volver arriba


 
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.